Era de esos días en los que crees que el mundo es perfecto, que todo está bien en el mundo a pesar de la guerra, la pobreza, el hambre y el calentamiento global. Cuando te despiertas feliz, el tiempo te rinde, el día está lindo… Pero de repente algo pasa y todo cambia, el mundo resulta que no era tan bello como se proyectaba esa mañana, era una de esas experiencias que marcan tu vida.
Nunca he sido de las personas que se deja querer mucho, que abre el corazón y se muestra vulnerable ante el mundo; creo que esa es la razón por la que el otro niño, un tal G. no me paró mucho, porque no era la niña que se deja querer. Pero fíjate cómo son las cosas, bastó que abriera un poco la mente y el corazón para encontrarme con la sorpresa.
Sin embargo, la cosa no era tan grave, por lo menos no para mí, la cosa fue grave cuando mis amigos se enteraron… ¡Ay Dios! La cosa ahora sí se puso como fea. Pero al final del día, ellos siempre estuvieron ahí para escucharme, ver cómo me hacía la loca y después para leer el respectivo email diciéndoles lo que pensaba.
Pero, esas noticias de las que uno se entera, de ese niño que te cambió la vida para bien, no son las únicas que hacen que te des cuenta que el mundo cambió después de levantarte y pensar que todo estaba bien. Lo que hizo que la vida cambiara fue darme cuenta de que la gente siempre pensará primero en sus intereses y que esas cosas el 99% de las veces le hace daño al mundo.
Así que, al final del día, el calentamiento global, la guerra, la pobreza, el hambre, parecen ser problemas que están demasiado lejos de mí porque primero tengo que resolver los problemas con la gente que tengo cerca.
¡Qué problema tan grande y tan sabroso este de vivir!
Nunca he sido de las personas que se deja querer mucho, que abre el corazón y se muestra vulnerable ante el mundo; creo que esa es la razón por la que el otro niño, un tal G. no me paró mucho, porque no era la niña que se deja querer. Pero fíjate cómo son las cosas, bastó que abriera un poco la mente y el corazón para encontrarme con la sorpresa.
Sin embargo, la cosa no era tan grave, por lo menos no para mí, la cosa fue grave cuando mis amigos se enteraron… ¡Ay Dios! La cosa ahora sí se puso como fea. Pero al final del día, ellos siempre estuvieron ahí para escucharme, ver cómo me hacía la loca y después para leer el respectivo email diciéndoles lo que pensaba.
Pero, esas noticias de las que uno se entera, de ese niño que te cambió la vida para bien, no son las únicas que hacen que te des cuenta que el mundo cambió después de levantarte y pensar que todo estaba bien. Lo que hizo que la vida cambiara fue darme cuenta de que la gente siempre pensará primero en sus intereses y que esas cosas el 99% de las veces le hace daño al mundo.
Así que, al final del día, el calentamiento global, la guerra, la pobreza, el hambre, parecen ser problemas que están demasiado lejos de mí porque primero tengo que resolver los problemas con la gente que tengo cerca.
¡Qué problema tan grande y tan sabroso este de vivir!
2 comentarios:
Ok, eres la más gafa de todas que no me habías dicho que tenías un blog!!! Acabo de leer y debo decirte que me encantó y que identifiqué con demasiadas cosas. Amé lo de ordenada en su agenda pero no en la vida real, creo que voy a hacer un post sobre eso jajajajaja, demsiado bueno Lau. Pero creo que con lo que más me idnetifiqué es con lo de hacerse de piedra. Como si uno fuese incondicional sabes? Tu puedes entender a todos y estar ahí para todos. Tanto que te olvidas de ti. Eso está un poco mal, porque luego uno se da cuenta que es una olla de presión a punto de estallar. Te quiero muchísisisisismo. Beso y te estaré leyendo! ahhhhh y gracias por lo de no decir nada!
jejeje.. qué linda, mi Lau!!! Puedo entenderte, sin saber exactamente de lo que estás hablando... está bien si has decidido nos mostrar tu vulnerabilidad al descubierto, pero me siento rpivilegiada de poder compartir contigo un trocito de esa vulnerabilidad... porque querer a alguien es comenzar a mostrarte vulnerable, pero sabes qué es lo mejor de todo? que TODO esto, es absolutamente HUMANO... y tú muy bien lo sabes!
Te quiero!!!
Publicar un comentario